A lo largo del recorrido de 20 kilómetros, contemplará algunos de los paisajes más agrestes, espectaculares y espléndidos de Noruega. En la estación de alta montaña de Myrdal, a 866 metros sobre el nivel del mar, el Tren de Flåm se encuentra con la línea de Bergen para la conexión con los trenes que van hacia Oslo y Bergen.
A través del encantador Valle de Flåm
El tren deja atrás las azules aguas de Aurlandsfjord y su suave y fértil clima costero. Tres kilómetros después verá, en un precioso entorno, la iglesia medieval de madera de Flåm con su color de brea, que data de 1667. En la granja situada junto a la iglesia hay un alto obelisco en memoria del poeta Per Sivle, nacido aquí. Después se llega a la impresionante cascada Rjoandefossen, que tiene una caída de 140 metros por la ladera de la montaña.
El Tren de Flåm cruza el valle y el río tres veces en su camino desde Flåm a Myrdal. En lugar de construir puentes, los ingenieros optaron por soterrar el río mediante túneles por debajo de la línea de ferrocarril. En la estación de Berekvam hay doble vía, de forma que se encuentran los trenes que circulan en ambas direcciones; disfrutará de unas vistas impresionantes de las agrestes laderas y los arroyos que se precipitan hacia el río, situado mucho más abajo, en el estrecho y profundo desfiladero.
En Blomheller, tendrá la prueba evidente de que el Valle de Flåm no solo ofrece un paisaje idílico y tranquilo. Las huellas que hay en las laderas debidas a avalanchas y caídas de rocas demuestran que las fuerzas de la naturaleza no se deben tomar a la ligera. Aquí la novedad son los modernos pastos de montaña para cabras en Kårdal. Este rebaño de 150 cabras ofrece una oportunidad para tomar preciosas fotografías. El paisaje que rodea a los pastos es de una riqueza difícil de encontrar. Campos verdes en las márgenes del río, bosques de abedules en las laderas y picos nevados a lo lejos...
Al salir del túnel más largo del Tren de Flåm (el túnel Nåli, de 1320 metros de longitud), aparece una maravillosa vista de las vías que ascienden por cuatro cornisas hasta la estación de Myrdal. También podrá ver la antigua ruta de transporte que transcurre por la alta montaña de Myrdal por 21 curvas cerradas. El tren realiza una parada en la famosa cascada Kjosfossen. En ninguna otra parte del mundo, los viajeros de un tren pueden disfrutar de una cascada tan impresionante.
Después, el tren pasa por un túnel con forma de herradura que gira 180 grados a través de la montaña. A través de las aberturas de la cornisa, se puede ver una panorámica del agreste lado de Kårdal, con el arroyo como un hilo plateado que se hunde en las profundidades del valle. En el otro lado se encuentra la empinada carretera de Berg, con las vías incrustadas en un estrecho saliente de la ladera. El tren pasa por el precioso lago de montaña Reinungavatnet, que es la fuente de las cataratas Kjosfossen. En Vatnahalsen, podrá deleitarse con una última vista espectacular sobre las montañas y el páramo. El tradicional hotel de montaña de Vatnahalsen está situado cerca de la estación y es un buen punto de partida para hacer senderismo, excursiones en bicicleta, por la Ruta de los Camineros y rutas por el magnífico terreno de esquí en invierno.
En la estación de alta montaña de Myrdal, a 866 metros sobre el nivel del mar, el Tren de Flåm se encuentra con la línea de Bergen para la conexión con los trenes que van hacia Oslo y Bergen.